miércoles, junio 01, 2016

10Y62

Uno de los ejemplos clásicos de una tragedia con un nivel mayor de complejidad es el de un naufragio. Sometidos a condiciones extremas, las decisiones que toman los náufragos para sobrevivir son difíciles de juzgar basados en los estándares de los tiempos de paz. 


Hay un caso famoso en Inglaterra en el siglo diecinueve, de cuatro marineros a la deriva por algo más de dos semanas. Tres de ellos eran experimentados pero el otro era un novato. Dicen los tres que el joven se fue debilitando y, en un arranque de desespero, tomó agua de mar, algo que terminaría de enfermarlo. 

Cuando llegaron a su límite, los marineros decidieron seguir la ley del mar, es decir matar al más débil y comérselo, para poder resistir un tiempo más. Días después fueron encontrados y regresaron a tierra firme. 

El caso es famoso porque al saberse de los hechos, fueron apresados y enjuiciados. Les dieron condena por homicidio, aunque creo fue una sentencia suspendida. Se recuerda el caso como la primera vez que la jurisprudencia formal se superpuso a la ley informal de los marineros, resultado de siglos de experiencia, en cuanto al acto de matar. 

¿Qué diría la teoría de las capacidades en éste caso? ¿Serviría de algo? Mi impresión es que la decisión de los marineros no habría sido distinta, y que tales situaciones requieren un enfoque ético diferente. 

No hay comentarios.: